Hace poco tuve un encargo curioso. Una acordeonista había escuchado mis micrófonos en Italia, le gustaron y quería tener unos. Pero ella no sabía ni qué era la alimentación phantom ni lo que era un mezclador de audio. Eso sí, tenía en casa un ampli de guitarra y quería sonorizar su acordeón con él.
Había que hacer dos preamplificadores y un mezclador para atacar en un solo cable la señal de los dos micrófonos como si fuese una guitarra, y alimentado con una pila.
Hay que empezar diseñando un circuito y montándolo en una placa de pruebas, y hacerlo sonar a ver si el resultado es el esperado.
Si suena bien se pasa a un circuito impreso definitivo.
Se monta en una cajita con los micrófonos completos.
Se coloca en el tirante del acordeón,
Y ¡a tocaaaaar!