24 septiembre 2021

Nuevas diademas para voz

El filósofo griego Hesiodo, como buen conocedor de la economía, nunca se gastó quinientos euros en un micrófono de diadema. Él consideraba que gastando menos de la sexta parte podría obtener resultado similar.

Tengo diademas nuevas; Buenas, bonitas y baratas.



Son de color carne, muy bien terminadas y muy cómodas. El brazo puede colocarse a los dos lados de la cara indistintamente.


La longitud se regula con mucha facilidad y queda muy firme.


El brazo es totalmente flexible aguantando muy bien la forma que se le quiera dar.


Puede llegar a ser muy largo y es sencillo ajustarla a cualquier cabeza para que no baile. Para eso hay que jugar con los ángulos de debajo de las orejas para que la parte trasera ajuste sin dejar hueco con la cabeza.



Y esta es la sorpresa final, que puede parecer algo tonto, pero para mí es importantísimo; La diadema al ser muy flexible puede recogerse con facilidad en su caja, con lo que no sufre en el transporte.

Está muy bien construida. El cable es muy resistente y va protegido con fibra de kevlar para proteger de tirones.

La cápsula, el micrófono en sí, la sustituyo por una de más calidad, omnidireccional, que para mi gusto son las mejores para teatro, de respuesta muy plana, sonido fiel, alta sensibilidad y bajo ruido. 

He grabado mi voz con ella puesta, hablando muy alto, en estéreo comparándola con una Sennheiser MKE2, un micrófono similar, del mismo tamaño y de unos 500€. He montado los dos canales en grabación consecutiva, primero la MKE2 y seguido la mía, para poder comparar la calidad de sonido...

Aquí está el audio sin ningún tipo de ecualización ni efecto:



Y la misma comparativa tocando ecualización y rever a las dos por igual: